31/10/17

humildad

PD2: Dijo San Juan Pablo II: “Dios se deja conquistar por el humilde y rechaza la arrogancia del orgulloso”. Cuánta razón tenía. Vivimos en un mundo de soberbios presuntuosos, que andan fardando todo el día de lo que dicen que tienen o son… Humildad. Siempre, mucha humildad.

30/10/17

para evitar el estrés

PD1: Muy buenos consejos, mejor que el yoga!!!

30 útiles consejos para evitar el estrés

Sentimos que el tiempo no alcanza para nada.

Te dejamos estos sencillos consejos para ayudarte:

1. Disfruta cada día.

2. Levántate a tiempo para empezar el día sin apuros.

3. Deja un poco de tiempo extra para hacer las cosas o llegar a algún lugar.

4. Aprende a decir que no a proyectos que no pueden introducirse en tu horario de trabajo o que comprometerían tu salud mental.

5. Delega tareas a personas capaces.

6. Simplifica tu vida.

7. Recuerda que menos es más.

8. Ordena tu tiempo. Dale más tiempo a grandes cambios o proyectos difíciles.

9. Organízate de tal manera que cada cosa tenga su espacio.

10. Escribe las cosas.

11. Todos los días encuentra un momento para estar a solas contigo mismo/a y otro para estar a solas con Dios.

12. Haz suficiente ejercicio.

13. Aliméntate bien, con una dieta saludable y balanceado/a.

14. Bebe agua. Tu cuerpo se deshidrata cuando estás bajo estrés, tensión ó ansiedad. Beber agua contribuye a la relajación.

15. Haz oración.

16. Descansa lo suficiente.

17. Toma un baño relajante.

18. Camina, ponte ropa cómoda y camina un rato. Una caminata al aire libre, de 10 a 30 minutos diarios, te ayuda a relajarte.

19. Lleva contigo algo para leer mientras esperas en colas.

20. Cultiva un hobbie o afición.

21. Sonríe.

22. ¡Ríe más fuerte!

23. Desarrolla una actitud tolerante; la mayoría de las personas tratan de hacer las cosas de la mejor manera posible.

24. Habla menos, escucha más.

25. Sé amable con las personas que no lo son; tal vez ellos lo necesitan más.

26. Rodéate de recuerdos lindos, enmarca tus fotos favoritas y colócalas en un sitio visible, pon frases positivas en lugares visibles.

27. Reduce el ritmo, aprende a disfrutar cada momento de tu vida.

28. Empieza a buscar amistad con gente feliz y no estresado/a.

29. Ve a dormir en el momento preciso. Duerme mínimo 7 horas

30. Todas las noches, antes de dormir, haz un examen de conciencia y un recuento de todas las cosas buenas que tuviste en ese día. Agradece a Dios, pide perdón por tus faltas y pídele que te dé un descanso reparador

27/10/17

diálogo

PD2: Para mejorar el diálogo en la familia lo más importante es que haya diálogo. Al final del día, después de una jornada maratoniana y agotadora… ¿a quién le apetece hablar? O somos capaces de incluir en nuestras agendas "momentos de diálogo" con nuestra pareja, o con nuestros hijos, aunque sean pocos, pero intensos, sin distracciones, sin móviles… o iremos perdiendo esa costumbre y nos convertiremos en meros "compañeros de piso". El mejor regalo que se puede hacer a una familia es una mesa camilla alrededor de la cual sentarse a hablar, sin el móvil, por supuesto.

Pero lo que más mata a la familia y sus tertulias, donde uno cuenta lo que ha pasado durante el día, lo que le pasa a los familiares y amigos, los chascarrillos, donde se comenta los devenires de la economía, los trabajos y estudios, y últimamente la política, es la televisión. Siempre encendida, incluso mientras se cena, ¡qué desastre! Apágala. O mucho mejor, tírala por la ventana, aunque sea nueva… Pero fíjate que no pase nadie por la calle primero.

26/10/17

sonríe a todos

PD4: "La revolución del amor comienza con una sonrisa. Sonríe a quien no quisieras sonreír." (Santa Teresa de Calcuta)

25/10/17

recomendaciones del Papa para confesarse

PD2: Esto dice el Papa para confesarse:

La confesión explicada por el Papa Francisco en 5 párrafos

Al explicar cosas a veces complejas de explicar el Papa Francisco tiene el don de la brevedad sin detrimento de lo que es necesario incluir al decir lo que dice. Lo ha vuelto a hacer al explicar el sacramento de la reconciliación (penitencia o confesión). Los cinco párrafos centrales son estos:

1."En la celebración del Sacramento de la reconciliación, el sacerdote no representa solamente a Dios, sino a toda la comunidad, que se reconoce en la fragilidad de cada uno de sus miembros, que escucha conmovida su arrepentimiento, que se reconcilia con Él, que lo alienta y lo acompaña en el camino de conversión y de maduración humana y cristiana".

2.Alguno puede decir: “Yo me confieso solamente con Dios”. Sí, tú puedes decir a Dios: “Perdóname”, y decirle tus pecados. Pero nuestros pecados son también contra nuestros hermanos, contra la Iglesia, y por ello es necesario pedir perdón a la Iglesia y a los hermanos, en la persona del sacerdote.

3.“Pero, padre, ¡me da vergüenza!”. También la vergüenza es buena, es saludable tener un poco de vergüenza. Porque cuando una persona no tiene vergüenza, en mi país decimos que es un ‘sinvergüenza’. La vergüenza también nos hace bien, nos hace más humildes. Y el sacerdote recibe con amor y con ternura esta confesión, y en nombre de Dios, perdona.

4.También desde el punto de vista humano, para desahogarse, es bueno hablar con el hermano y decirle al sacerdote esas cosas que pesan tanto en mi corazón: uno siente que se desahoga ante Dios, con la Iglesia y con el hermano. Por eso, no tengan miedo de la Confesión. Uno, cuando está en la fila para confesarse siente todas estas cosas – también la vergüenza – pero luego, cuando termina la confesión sale libre, grande, bello, perdonado, limpio, feliz. Y esto es lo hermoso de la Confesión.

5.Quisiera preguntarle, pero no responda en voz alta ¿eh?, responda en su corazón: ¿cuándo fue la última vez que se confesó? ¿Dos días, dos semanas, dos años, veinte años, cuarenta años? Cada uno haga la cuenta, y cada uno se diga a sí mismo: ¿cuándo ha sido la última vez que yo me he confesado? Y si ha pasado mucho tiempo, ¡no pierda ni un día más! Vaya hacia delante, que el sacerdote será bueno. Está Jesús, allí, ¿eh? Y Jesús es más bueno que los curas, y Jesús te recibe. Te recibe con tanto amor. Sea valiente, y adelante con la Confesión».

24/10/17

para preguntar lo que tenemos que hacer

PD2: ¿Cuántas veces acudimos al sacerdote para que nos diga lo que tenemos que hacer, para que nos solucione nuestros problemas? Quizás nos estemos equivocando y al que tengamos que acudir es al Señor…

Hoy Jesús me regañó mientras celebraba la misa

Como todos los sacerdotes del mundo, no pasa un día sin que busquen al Padre Sergio para platicar y preguntarle qué hacer ante distintas situaciones: “Fíjese que mi suegra está en contra mía, me dan ganas de alejarme de ella y dejarle de hablar, ¿me recomienda que lo haga?; mi abuelo nos dejó una herencia a todos, pero unos no se la merecen, ¿conviene que haga justicia?; padre ya no aguanto a mi esposo, sus insultos, sus maltratos, me dan ganas de dejarlo, ¿cree que sea conveniente?; siento que todo me ha salido mal en la vida, todos mis esfuerzos han sido en vano, estoy cansada, ¿qué hago…?

En fin, son muchas preguntas cómo estas las que me hacen todos los días. Siempre trato de escuchar con el corazón y de iluminarles con algunas palabras de esperanza, invitándolos a hacer el bien, a que le pidan fuerza a Dios para seguir adelante y recordándoles que más vale padecer una injusticia que cometerla.

Pero lo que más hago es rezar por ellos, especialmente en la Eucaristía cuando tengo entre mis manos a mi Señor le digo: “Te encargo a tal persona y también a aquella, ayúdales para que tomen las mejores decisiones para gloria Tuya y beneficio de sus familias…”.

Pero el otro día llegaron a mí en una sola tarde infinidad de problemas y sentía que mis consejos eran muy pobres. Cuando llegué a la Misa era un mar de angustia, seguía pensando en cómo lo haría para orientarlos. Y justo después de la consagración tartamudeé en varias ocasiones, y me recriminé: “Lo estás diciendo mal”.

Y en ese momento alcancé a escuchar a mi dulce Jesús: “Así es, lo estás diciendo mal, tú no podrás ayudarlos, diles que me pregunten a Mí ‘qué haría Yo en su lugar’ y les indicaré el camino”.

Me había equivocado, no solo en el tartamudeo sino en la manera de querer auxiliar. Jesús tenía razón, ¿quién mejor que Él para decirnos qué hacer? Así que me propuse para la siguiente no preocuparme tanto y más bien alentarlos para que se acercaran a Dios y le pidieran consejo a Él mismo.

Esa misma noche antes de salir de la capilla se presentó un señor que quería hablar conmigo. Me contó que su papá fue muy cruel con él toda su vida; prácticamente había crecido entre insultos y golpes, además nunca quiso apoyarlo a él y a sus hermanos para ir a la escuela, sin contar que a su mamá sólo le sabía dar ordenes con gritos, así que en cuanto pudo se alejó de él y ya tenía más de 30 años que no lo veía; pero hacía una semana una tía le contó que lo están dializando, que estaba muy débil y que nadie de la familia le quería ayudar, y por fin me preguntó: “Padre, gracias a Dios tengo una familia, soy muy feliz, sé que mi esposa y mis hijos con gusto recibirán a mi papá, pero creo que no es justo que ahora yo le ayude después de todo lo que él nos hizo sufrir a mí, a mi mamá y a mis hermanos, ¿verdad que no estoy obligado a ayudarle?”.

Le di un abrazo: “Hijo, lamento todo lo que has sufrido y entiendo que no se te haga justo, te pido de favor que me acompañes, te voy a abrir la capilla del Santísimo y quiero que le preguntes a Nuestro Señor ‘qué haría Él en tu lugar’”.

Al cabo de una media hora volvió y me dijo entre lágrimas: “Padre, lo voy a recibir, gracias a mi padre tengo la vida, lo recibiré en mi casa y le ayudaré en todo lo que pueda…”.

Me fui a dormir muy alegre, sentía que ese día descansaría como nunca. Dios una vez más me mostró que los problemas los arregla Él, que yo solo debo acercarlos a Él; también me recordó lo fácil que sería nuestra vida si tan sólo lo invitáramos a ella.

Muchas cosas nos salen mal porque no pensamos en preguntarle a Jesús ‘qué haría Él en nuestro lugar’. cuánto me gustaría encontrarme a todos los que están atravesando por una dificultad o que necesitan tomar una decisión para decirles: No temas, ni te desgastes tanto, Dios te ama, está contigo y te ayudará, solamente ponte de rodillas ante Él y pregúntale ‘mi buen Jesús, ¿qué harías Tú en mi lugar?’.

23/10/17

no te estreses

PD2: Elimina de tu vida todo aquello que te cause estrés y te quite la sonrisa. Sobre todo los lunes. Que cuando lleguemos a casa, desconectemos del día aterrador y de la tensión del trabajo, y seamos los tíos más simpáticos del mundo… Nos lo agradecerán.

20/10/17

en este mundo competitivo...

PD2: No compitas con nadie, no tienes que demostrarle nada a nadie, no tienes que llegar a donde otro llegó, solo superar tus propios límites. Pon un poco de humildad en tu vida…

19/10/17

no pretender que Cristo lo haga todo y nosotros nada

PD2: Muchos están convencidos de tener ya el “billete” para el Paraíso solamente porque piensan que son buenos. Cristo ha pagado el precio de nuestra salvación sin excluir a nadie, pero hay que observar unas condiciones básicas. Y, entre otras, está la de no pretender que Cristo lo haga todo y nosotros nada. Esto sería no solamente necedad, sino malvada soberbia.

18/10/17

insistir e insistir

PD2: Hay que insistir por las cosas que rezamos… El beato fray Gil de Asís, compañero de san Francisco, dijo: “Reza con fidelidad y devoción, porque una gracia que Dios no te ha dado una vez, te la puede dar en otra ocasión. De tu cuenta pon humildemente toda la mente en Dios, y Dios pondrá en ti su gracia, según le plazca”.

17/10/17

4 salmos

PD2: Son preciosos:

4 salmos que todo el mundo debería saber de memoria

Los salmos son poderosas oraciones que expresan los deseos más profundos de nuestro corazón

Uno de los libros más apreciados y usados para rezar de toda la Biblia es el Salterio (el Libro de los Salmos), tradicionalmente entendido como las oraciones personales del Rey David.

Se admite generalmente que David muy probablemente escribió muchos (pero probablamente no todos) los salmos, y estas oraciones poéticas revelan una vida interior llena de dolor, dudas, esperanzas, tristezas y alegría, con tal riqueza que, miles de años después, siguen siendo un perfecto reflejo de la condición humana. No importa qué es lo que necesites expresar con la oración: hay un salmo adecuado para ello.

Los salmos son la base de la Liturgia de las Horas (u Oficio Divino), que la Iglesia anima a todos los cristianos a rezar todo lo que sea posible, para enriquecer la relación personal con Dios.

Durante siglos, monjes y monjas acostumbraban a memorizar los salmos, pues los rollos y libros no eran fáciles de utilizar. En particular, los salmos nocturnos, que se rezaban en Maitines y Completas, tenían que aprenderse para evitar el uso de cirios y fuego.

La Iglesia aún recomienda memorizar algunos salmos para rezar con ellos, especialmente en tiempos de dificultad o alegría. Estas oraciones son medios particularmente poderosos para expresar lo profundo del corazón y los deseos y emociones mucho más allá de las palabras.

Aquí cuatro salmos especialmente recomendados:

Empezamos con el salmo más breve, el 117 (Laudate Dominum)

¡Aleluya! ¡Alaben al Señor, todas las naciones,
glorifíquenlo, todos los pueblos!
Porque es inquebrantable su amor por nosotros,
y su fidelidad permanece para siempre.
¡Aleluya!

Salmo 130 (De Profundis)

Desde lo más profundo te invoco, Señor.
¡Señor, oye mi voz!
Estén tus oídos atentos
al clamor de mi plegaria.

Si tienes en cuenta las culpas, Señor,
¿quién podrá subsistir?
Pero en ti se encuentra el perdón,
para que seas temido.

Mi alma espera en el Señor,
y yo confío en su palabra.
Mi alma espera al Señor,
más que el centinela la aurora.

Como el centinela espera la aurora,
espere Israel al Señor,
porque en él se encuentra la misericordia
y la redención en abundancia:
él redimirá a Israel
de todos sus pecados

Salmo 51 (Miserere)

¡Ten piedad de mí, Señor, por tu bondad,
por tu gran compasión, borra mis faltas!
¡Lávame totalmente de mi culpa
y purifícame de mi pecado!

Porque yo reconozco mis faltas
y mi pecado está siempre ante mí.
Contra ti, contra ti solo pequé
e hice lo que es malo a tus ojos.

Por eso, será justa tu sentencia
y tu juicio será irreprochable;
yo soy culpable desde que nací;
pecador me concibió mi madre.

Tú amas la sinceridad del corazón
y me enseñas la sabiduría en mi interior.
Purifícame con el hisopo y quedaré limpio;
lávame, y quedaré más blanco que la nieve.

Anúnciame el gozo y la alegría:
que se alegren los huesos quebrantados.
Aparta tu vista de mis pecados
y borra todas mis culpas.

Crea en mí, Dios mío, un corazón puro,
y renueva la firmeza de mi espíritu.
No me arrojes lejos de tu presencia
ni retires de mí tu santo espíritu.

Devuélveme la alegría de tu salvación,
que tu espíritu generoso me sostenga:
yo enseñaré tu camino a los impíos
y los pecadores volverán a ti.

¡Líbrame de la muerte, Dios, salvador mío,
y mi lengua anunciará tu justicia!
Abre mis labios, Señor,
y mi boca proclamará tu alabanza.

Los sacrificios no te satisfacen;
si ofrezco un holocausto, no lo aceptas:
mi sacrificio es un espíritu contrito,
tú no desprecias el corazón contrito y humillado.

Salmo 23 Dominus regit me

El Señor es mi pastor,
nada me puede faltar.

Él me hace descansar en verdes praderas,
me conduce a las aguas tranquilas
y repara mis fuerzas;
me guía por el recto sendero,
por amor de su Nombre.

Aunque cruce por oscuras quebradas,
no temeré ningún mal,
porque tú estás conmigo:
tu vara y tu bastón me infunden confianza.

Tú preparas ante mí una mesa,
frente a mis enemigos;
unges con óleo mi cabeza
y mi copa rebosa.

Tu bondad y tu gracia me acompañan
a lo largo de mi vida;
y habitaré en la Casa del Señor,
por muy largo tiempo.

16/10/17

la libertad, ¡qué responsabilidad!

PD4: ¡Ni Jesús pudo convencerles...! ¡Qué misterio, el de la libertad humana! Podemos decir “no” a Dios...! El mensaje evangélico no se impone por la fuerza, tan sólo se ofrece y yo puedo cerrarme a él; puedo aceptarlo o rechazarlo. El Señor respeta totalmente mi libertad. ¡Qué responsabilidad para mí!

11/10/17

completar el IKIGAI

PD2: En Japón le llaman IKIGAI. En la cultura Occidental cristiana, este IKIGAI se complementa con una visión sobrenatural del mundo: sabernos Hijos de Dios, ver su mano en todas las cosas, tenerlo presente en todos los momentos. Si supieras cuanto IKIGAI tiene tanta gente que conozco, sin necesidad de hacer yoga, sino dedicándole un rato cada día a las cosas de Dios, a ayudar a los otros…

Is this Japanese concept the secret to a long, happy, meaningful life?

What’s your reason for getting up in the morning? Just trying to answer such a big question might make you want to crawl back into bed. If it does, the Japanese concept of ikigai could help.
Originating from a country with one of the world's oldest populations, the idea is becoming popular outside of Japan as a way to live longer and better.
While there is no direct English translation, ikigai is thought to combine the Japanese words ikiru, meaning “to live”, and kai, meaning “the realization of what one hopes for”. Together these definitions create the concept of “a reason to live” or the idea of having a purpose in life.
Image: Toronto Star
Ikigai also has historic links: gai originates from the word kai, which means shell. These were considered very valuable during the Heian period (794 to 1185), according to Akihiro Hasegawa, a clinical psychologist and associate professor at Toyo Eiwa University, adding a sense of "value in living".
To find this reason or purpose, experts recommend starting with four questions:
What do you love?
What are you good at?
What does the world need from you?
What can you get paid for?
Finding the answers and a balance between these four areas could be a route to ikigai for Westerners looking for a quick interpretation of this philosophy. But in Japan, ikigai is a slower process and often has nothing to do with work or income.
In a 2010 survey of 2,000 Japanese men and women, just 31% of participants cited work as their ikigai.
Gordon Matthews, professor of anthropology at the Chinese University of Hong Kong and author of What Makes Life Worth Living?: How Japanese and Americans Make Sense of Their Worlds, told the Telegraph that how people understand ikigai can, in fact, often be mapped to two other Japanese ideas – ittaikan and jiko jitsugen. Itaikkan refers to “a sense of oneness with, or commitment to, a group or role”, while jiko jitsugen relates more to self-realization.
Matthews says that ikigai will likely lead to a better life “because you will have something to live for”, but warns against viewing ikigai as a lifestyle choice: “Ikigai is not something grand or extraordinary. It’s something pretty matter-of-fact.”
Okinawa, a remote island to the south west of Japan, has an unusually large population of centenarians and is often referred to in examinations of ikigai - though not by Gordon.
According to Dan Buettner, an expert on Blue Zones, the areas of the world where people live longest, the concept of ikigai pervades the life of these islanders. Combined with a particular diet and support network of friends or “moai”, ikigai is helping people live longer on Okinawa as it gives them purpose, he says, who provides a karate master, fisherman and great-great-great-grandmother, all of whom are more than 100 years old, as examples.
Just knowing what your ikigai is is not enough – all of these people put their purpose into action, Buettner explains in a BBC interview. Researchers stress that ikigai can change with age. For anyone whose work is their reason for living, this will come as a relief as they approach retirement and begin the search for a new ikigai.

10/10/17

el más amado de la historia

PD1: A los grandes personajes, al cabo del tiempo, se les admira, pero no se les ama. Hoy nadie ama a Cervantes o a Miguel Ángel. Sin embargo, Jesús es el más amado de la historia. Hombres y mujeres dan la vida por amor a Él. Unos de golpe en el martirio, y otros “gota a gota”, viviendo sólo para Él. Son miles y miles en el mundo entero.

9/10/17

sobre consejos y decisiones

PD5: "Tu opinión la acepto, pero la decisión la tomo yo." Nos empeñamos en darle consejos utilísimos a la gente mayor, para que hagan, con los últimos años de su vida, lo que nosotros consideramos mejor para ellos, pero no aceptamos su negativa a que los cumplan. Hacen bien en no hacernos caso. Faltaría más. Ellos saben perfectamente lo que es bueno para ellos, y nuestras opiniones o consejos son solo eso… Las decisiones que tomen, aunque no nos gusten, es lo que han optado hacer…

6/10/17

los soberbios y los humildes

PD3: Podremos encontrar en el Cielo todos los vicios y pecados, menos la soberbia, puesto que el soberbio no reconoce nunca su pecado y no se deja perdonar por un Dios que ama hasta el punto de morir por nosotros. Y en el infierno podremos encontrar todas las virtudes, menos la humildad, pues el humilde se conoce tal como es y sabe muy bien que sin la gracia de Dios no puede dejar de ofenderlo, así como tampoco puede corresponderle.

5/10/17

Olvídate de Cataluña y búscale...

PD5: Hay que conocer el rostro de Dios a través de María. Octubre, mes del Rosario, el mejor medio…

4/10/17

volver a amar

PD3: Donde hay amor hay felicidad. Es importante aprender a amar, a nuestras mujeres, a nuestros hijos, a nuestros familiares y amigos. Reconocer el rostro de Dios en el prójimo y quererle como el Señor nos quiere.

Con el paso de los años, nuestro amor por los de nuestro entorno se enfría. Hay que volver a enamorarse de nuestra mujer, querer a nuestros hijos como adolescentes o adultos. Amar a todos lo que pasan por nuestra vida…

3/10/17

mucha ternura

PD3: Todo tiene que ver con la ternura…

Por qué expresar ternura

Hay miradas, tonos de voz, gestos, palabras que te atraviesan todo el cuerpo como un calambre hasta llegar a lo más profundo del corazón. No hablemos ya de las caricias que amparan, expresan unión y confianza, comunican aliento y calor…

La ternura, cuando es auténtica, es un “sí” a la otra persona, es complacencia, inclinación, participación, es una expresión concreta del sufrir y gozar con el otro, explica Federico E. von Gagern en el libro Para esposos, de la editorial Guadalupe.

La forma más primitiva de las caricias es la proximidad corporal. Todos deseamos sentirnos cobijados, desde los recién nacidos y los ancianos más vulnerables hasta las personas más fuertes, y recibir ternura puede ayudarnos a ello.

Si tienes pareja, seguramente has escuchado alguna vez el palpitar de su corazón. Es una experiencia de tranquilidad, sosiego, calor, amparo,… probablemente relacionada con momentos prenatales que no podemos recordar. Una experiencia también de recogimiento, como un oasis de paz en medio de un mundo de estímulos y actividad frenética. Un buen preámbulo a una unión sexual.

La ternura puede servir para mantener viva y acrecentar la intensidad del amor. Pero que sea este amor el que haga nacer la ternura, y no el dominio del yo sobre el tú. Porque la ternura también podría no corresponderse con la verdad interior, y usarse por ejemplo para satisfacer una curiosidad, combatir el aburrimiento, vivir una sensación, conquistar una victoria.

Muchas personas sufren inseguridad y sentimientos de inferioridad por no haber recibido en su infancia un poco de ternura nacida de un amor natural y verdadero. ¡Cuánta hambre de caricias en tantos que no perciben cuánto valen o sufren angustia existencial!

Acariciándonos desde el alma con la piel, la mirada, la palabra,… libramos al yo de su aislamiento, creamos una relación con el tú como con el propio yo que nos conduce al nosotros.

Entonces nos manifestamos nuestro amor mutuo, nos confirmamos el uno al otro con un sí aprobatorio, gozamos con la proximidad y con el contacto personal, nos queremos y hacemos bien, nos regalamos, nos ayudamos, nos hacemos felices.

2/10/17

sembradores de PAZ y ALEGRIA

PD2: No sé si hoy es un buen día para decir todo esto: Debemos sembrar paz y alegría. No debemos decir ninguna palabra molesta para nadie. Debemos ir del brazo de los que no piensan como nosotros. No debemos molestar jamás a nadie. Debemos ser como hermanos de todas las personas…