30/9/16

paciente espera

PD4: En la vida hay que actuar, no nos podemos quedar esperando que las cosas salgan por sí solas. Hay que regar mucho, echarle mucho amor a la gente, y esperar, mucha paciencia, sabernos ganadores de la vida eterna, y llevarnos con nosotros a mucha gente también…

29/9/16

la alegría del perdón

PD1: En la confesión, el que tienes delante no es el sacerdote, ni siquiera el Papa, sino es el mismo Cristo. Es Él el que nos perdona nuestras faltas. No mires la cara del cura que es Dios quien te perdona…
Luego ya sabes, esa alegría de saberte limpio, ese volver a nacer, aunque caigamos una y otra vez en lo mismo…, que fundamentalmente es la soberbia en sus múltiples facetas… Pues a volver a confesarse y a recibir nuevas gracias.

28/9/16

no mentir

PD3: Me encanta decir la verdad. Creo que es mucho mejor que andar mintiendo, o contando cosas infladas. La gente miente por vergüenza, por presumir, por fardar, por evitar una reprimenda…, cuando ser franco es lo mejor que le puedes enseñar a los demás. Los matrimonios se rompen por mentiras entre los cónyuges. Los políticos son el paradigma de los grandes mentirosos. Las empresas, en su publicidad, nos intentan engañar para que les compremos sus mierdas. Para mis compañeros de profesión, en la banca privada, la mentira está a la orden del día… Se colocan unos productos terroríficos a los clientes so pretexto de que son buenos, con una falta de ética y valores que alucinarías si supieras cuáles son las prácticas habituales de los banqueros privados…

A mis hijos les he puesto toda mi vida el ejemplo de ir con la verdad por delante. En la vida social, que es también donde más mentiras se sueltan, es muy importante ser muy francos, muy veraces, ¡Qué más me da lo que el otro piense de mi, que si no soy como él, que si no hago lo que los demás…! Pero el mundo funciona como una gran mentira, que va manipulando la vida de los demás…

El trato con los mentirosos hace que uno ande dudando, cuando le cuentan cosas, sobre si serán falsas, manipuladas, o tergiversadas, as usual… Y cuando te acostumbras a mentir, mientes por cualquier cosa, no sabes distinguir la realidad de la mentira, y te conviertes en persona de poco fiar…, poco querida, porque como dice el sabio refranero español, se coge antes a un mentiroso que a un cojo…, y provoca un fuerte rechazo emocional.

27/9/16

nos pierden los ojos...

PD5: Siempre andamos mirando mal. La vista nos pierde. Nuestros ojos generan que nuestra mente se dispare. En vez de mirar simplemente, no, prejuzgamos, decidimos que lo que vemos está bien o mal, que yo lo haría de otra forma, que eso está mal hecho, que si lleva la falda muy corta, que si así no se hace, que eso me gustaría tenerlo...

Si la vida es más simple. Es nuestra imaginación la que nos destroza. Y no estoy pensando en cosas del pito, sino en cosas del amor. Si sólo les quisiéramos más, al otro, a los demás, si les prejuzgáramos menos…

A mí me cuesta un montón. Es mi lucha personal, mirar con ojos limpios, sencillos, de niño pequeño, no de viejo cascarrabias como me veo demasiadas veces… Dejar que se dispare la imaginación, pero para querer a la gente más…, valorando los defectos que creo me muestran, que Dios los quiso así y por eso me los enseñan, siendo consciente que no se es mejor ni por ser más guapo, ni más rico, ni más simpático. Que los feos, antipáticos y pesados nos los puso Dios cerca por algo…

26/9/16

mi querida hermanita

PD2: El Síndrome de Down es un niño que sólo da una mala noticia en su vida; el resto son todas buenas.

Este verano hemos tenido la suerte de convivir unos días con mi hermana de 47 años, y lo hemos pasado muy bien…

23/9/16

me tocó aprender

PD3: Estuve en mi curso anual hace unos días. Es intenso y agotador, de seis días de duración. Se empieza con una meditación seguida de Misa. Luego dos clases de catecismo, tenemos clase de teología (este año nos ha tocado Soteriología y la Creación), por la mañana y por la tarde, charla, hemos visto la carta del Papa sobre el Año de la Misericordia, oración, Rosario, examen, y mucha convivencia con otros 25 asistentes, que nos contamos nuestras cosas, nuestras aficiones, nuestra familias… No ha faltado tampoco alguna cerveza en el bar del pueblo y paseos. Es la mejor forma de actualizar nuestra fe, de adquirir nuevos conocimientos, de estar al día, de formarse, de aprender, de convivir con gente parecida. Cada vez que vuelvo pienso que ha sido la mejor de cuantas he hecho. Es un gran esfuerzo, pero es reconfortante.

22/9/16

dejar que nos encuentre

PD3: A los soberbios les cuesta más encontrar a Dios, mientras que los humildes lo hayan más fácilmente. Sencillez, no creerse mejor que los otros, así es como se consigue… Y mucha constancia, mucho insistir. Puede que hagamos oración y no oigamos nada…; insiste otro día, y otro día. Hay que buscarle, o dejar que nos encuentre.

21/9/16

los sermones de los curas

PD3: Interesante lo que cuenta Enrique García Máiquez sobre los largos sermones de los curas:

En la misa Ad Orientem (donde el sacerdote celebra mirando atrás), como espaldas y cogotes son bastante impersonales, el protagonismo era todo del sacramento; pero ahora, como las caras suelen ser tan singulares, surge, según el poeta, un excesivo protagonismo de la individualidad del sacerdote y la consiguiente tendencia a personalizar las homilías e, incluso, la liturgia. El colombiano Gómez Dávila ya había sentenciado con su puntería característica: "Los ritos preservan, los sermones minan la fe".

No debe de ser casualidad que el enfriamiento de la fe popular haya coincidido con las reformas litúrgicas y las homilías divagatorias. Todavía he visto yo en la Sierra de Cádiz los últimos coletazos de la sana costumbre de que los hombres aprovechasen la homilía para salir a echar un cigarro. Desde que dejaron de salirse, dejaron de entrar. Sería más considerado anunciar, cuando el sacerdote desee exceder el límite de un breve comentario a la palabra de Dios, una conferencia suya a otra hora distinta, y a ver quién iba. Soltárnosla a los que fuimos a misa es abusar de nuestra devoción

20/9/16

los fuertes aman...

PD4: Todo lo que hay que hacer es amar, es lo único importante que debemos hacer en esta vida, amar…

19/9/16

nosotros solos nada podemos

PD1: Idolatría es amar lo que uno hace sobre todas las cosas. Es pensar que nosotros nos bastamos y nos sobramos para hacerlo todo tan bien… ¡Ilusos! Si nosotros solos nada podemos; todo lo logramos no por nuestros méritos, o lo guapos o listos que seamos, si no porque Dios quiere, por un bien último que puede que no conozcamos… Pero pensar que somos tan capaces de hacerlo todo bien por lo machos que somos, por favor… Es Él el que quiere que pase lo que nos pasa.

13/9/16

el tiempo pasa...

PD2: ¿Qué es el tiempo? ¿Nos hacemos mayores? Los niños que nacen renuevan el tiempo, que nosotros hemos consumido y que a nuestros padres se les acaba...eso es el tiempo.

Hay que saber aprovecharlo ya que, cada día, se nos va acabando el tiempo que tenemos en la Tierra y empieza el tiempo del cielo…

toca sonreír

PD1: No te olvides de ponerte hoy tu mejor sonrisa. Recuerda: Tú puedes cambiar este mundo!

12/9/16

las alternativas como padres

PD1: ¡Qué difícil es esto de educar! Hay padres que, por muy autoritarios, pierden la confianza de sus hijos; otros que, por ser amiguetes de sus hijos, pierden la autoridad; otros que pasan, que piensan que sus hijos se educarán solos, sin marcarles muchas pautas, dejándoles que marquen su camino ellos solos (qué error). Hay que buscar siempre el punto medio, y echarle muchas horas, hablar mucho con ellos, darles muchos achuchones y abrazos, preocuparse mucho por sus cosas, aprender a escucharles, atender a ese poco que cuentan… Y sobre todo, no atosigarles, dejarles respirar, no sermonear, no decir que los tiempos pasados fueron mejores, es mentira, el presente y el futuro es mucho mejor y sólo ganará quien se actualice…, quien le dedique mucho tiempo.

9/9/16

esos ruidos molestos...

PD3: Estaba en Misa de diario con poca concurrencia el otro día y me impresionó el comentario de una feligresa a una señora, mi sobrina, que estaba con dos niños pequeños que revoloteaban, sin hacer demasiado ruido. En un momento determinado le dijo a mi sobrina que, con dos niños, ya era más que suficiente…, que no debería tener más. Estupefactos nos quedamos. No respondimos por educación, pero ay de estos cristianos que entienden tan mal el cristianismo…

Si supiera que se había dejado al pequeño en casa con su padre, que estaba embarazada de 4 meses, y que yo mismo he ido a Misa muchas veces con mis nueve hijos, dando algo la lata y tal…

A mí me encanta oir ese ruido celestial de fondo de uno que llora, de uno que se pelea con el otro, de uno que se le cae el bolso entero de la madre al suelo… Mucho mejor que esas melodías de los móviles que suenan sin cesar de la gente mayor que no consigue apagarlas ni a tiros…

Me parecen los mismos ángeles cantando y loando a Dios: la cháchara de los niños y, con una música celestial, los móviles de la gente mayor… Son esos ruidos que le llegan muy bien a Dios y nos sirve para después hacer un esfuerzo y volver a concentrarnos en lo que estamos, en la Misa.

8/9/16

lo que nos va ocurriendo

PD2: ¿No tendríamos que cambiar? Mira que nos quejamos por todo, en vez de dar las gracias por lo mucho que nos pasa, malo o bueno. Por algo será lo que nos va ocurriendo…

7/9/16

sin prisas

PD1: Cada uno requiere su tiempo. No nos debemos agobiar…, paciencia y mucha calma. Te lo digo yo que he educado a 9 hijos y sé que las prisas son muy malas. Hay que ayudarles en su proceso de maduración, hay que hablarles, darles mucho palique, pero sin atosigarles. Hay que demostrarles todo nuestro cariño, mucho amor, de verdad, no mientras miramos al móvil…

Educar sin prisa

Uno de los mayores enemigos de la educación es la prisa. Querer que nuestros hijos sean los primeros en hablar, en andar, en montar en bici, en aprender a leer y a escribir, en saberse las tablas de multiplicar, en dominar un segundo idioma… suele ser la aspiración de casi todos los padres.

Así que cuando la naturaleza impone un ritmo más lento que el que nosotros esperamos nos angustiamos y comenzamos a ponernos nerviosos: “¿Cuándo hablará bien?”, “¿Por qué no anda todavía?”, “¡Ya debería saber montar en bici!”, “¡Aún no lee bien!”, “A su edad y tiene una letra muy infantil”, “¡Qué podemos hacer para que se aprenda las tablas de una vez!, “Otros ya hablan inglés”… Estos padres se agobian y agobian a sus hijos sin una razón científicamente sostenible, sino únicamente porque no cumplen sus expectativas.

La maduración física, intelectual y afectiva de nuestros hijos no es una carrera contrarreloj, sino un proceso con una cadencia propia que a veces puede parecer incluso caprichosa. La estadística establece los márgenes de la normalidad, que suelen ser mucho más amplios de lo que nos imaginamos; sin embargo, nosotros nos fijamos más en el corredor de la calle de al lado o en el que va marcando los mejores tiempos.

Cuando nos preocupa su lentitud y consultamos con un especialista, con el pediatra o con el pedagogo, nos solemos encontrar –salvo algunas excepciones, claro está– con que nuestro hijo se encuentra entre los parámetros de la normalidad. Sin embargo, el dato no nos tranquiliza porque no nos conformamos con lo normal, sino que queremos que sobresalga, que bata un record, no importa en qué modalidad.

La trayectoria hacia la madurez no es una prueba de velocidad, sino una carrera de fondo. De poco sirve una salida explosiva, porque lo importante es llegar al final. Ser el primero en llegar a los controles intermedios solo sirve para engrosar el orgullo de los padres que están en la grada; lo que cuenta de verdad es llegar bien, sobre todo, a la línea de meta.

Si la prisa es el enemigo de la educación, la paciencia es su gran aliado. La necesitamos en todo momento y circunstancia: con el hijo lento, pero también con el que va muy deprisa; con el que le cuesta y con el que va sobrado; con el que tiene problemas y con el que todo parece tan fácil; con el que siempre llega primero y con el que siempre llega el último. Como decía el cirujano francés, Guillaume Dupuytren, “no hemos de apresurarnos, porque no tenemos tiempo que perder”.

En educación no hay soluciones rápidas; se educa a fuego lento. Más que de tupper y microondas, se trata de cazuela y pol-pol. Dejarse ganar por la prisa nos puede llevar a subir el fuego y a que se nos queme la comida.

6/9/16

los errores de nuestros padres y abuelos

PD1: Vivimos con nuestra propia filosofía de vida, que en muchos casos hemos heredado de nuestros padres y abuelos. Hay costumbres o dichos que decían nuestros padres que no eran muy buenos. Por ejemplo: “A la vecina del segundo no se la puede ni saludar”… O eso que decía la abuela que se hacía en su casa, cuando decía: “ mi madre siempre decía que…” Muchos casos son contrarios a lo que nos enseña el cristianismo. La definición de Dios en el Evangelio es: amor y misericordia. Y muchas de las prácticas antiguas no reflejan ni ese amor, ni esa misericordia. Mucha gente mayor no ha sabido evolucionar en su fe a los tiempos modernos y se han quedado en sus prácticas viejas, cuando lo que ahora se enseña y enfatiza es la misericordia y la caridad con los demás. Para ser fieles es lo que tenemos que hacer, ser amorosos y muy compasivos con todos…

5/9/16

Madre Teresa

PD1: Ya hay otra Teresa en el santoral de la Iglesia; es una monja menuda, humilde, con una sonrisa permanente en los labios. Fundó la Congregación de las Misioneras de la Caridad y cuidó con ternura de madre a los más pobres de los pobres.

Te invito a leer alguna de sus biografías y a dejaros seducir por la santidad de la Madre Teresa. https://youtu.be/p9Nx0FRnIEY

2/9/16

dar gracias a Dios por las vacaciones

PD1: Tras unas buenas vacaciones, tras un buen descanso que me ha permitido recargar pilas, uff como acabé de cansado en julio pasado, no puedo más que dar gracias a Dios por estos días de estar con la familia, con amigos y conocidos. ¡Cuánta cháchara! Qué suerte tenemos los que hemos tenido el privilegio de cortar, cambiar de aires y descansar. Cuánta gente no ha podido permitírselo… He tenido un nuevo nieto, el cuarto ya…, y viene otro en camino. Hemos disfrutado del mar, de estar juntos, de algunos lujos gastronómicos, de tantas cosas sencillas, pero no frecuentes en invierno… Pues eso, hoy le doy gracias a Dios por todos estos días, a los que han estado conmigo por compartir lo que hemos vivido juntos, los rollos que os he soltado, los chascarrillos que nos hemos dicho… Tantos días sin televisión, sin prensa, sin wifi, qué gozada!!! Tantos rezos y tantas gracias por la naturaleza que nos ha ido mostrando… Es que sales de la rutina diaria del trabajo y descubres un nuevo mundo y muchos minutos para hacer muchas cosas diferentes...