31/8/11

mis recuerdos de la JMJ

Estuvimos todos en Madrid, los 11 de la familia. 6 eran voluntarios y el resto peregrinos. Los voluntarios curraron de lo lindo y volvieron apasionados. Mis siete hijos mayores durmieron en Cuatro Vientos, bueno hubo uno que ni se tumbó, estaban trabajando. Las dos niñas pequeñas y nosotros fuimos a Cuatro Vientos a las 2030 y para nuestra sorpresa estaba ya lleno y no dejaban pasar. Íbamos con dos mochilas con cena y desayuno y dos esterillas para poder dormir. Fue desolador ver a miles de peregrinos de muchas nacionalidades, en especial a italianos, estadounidenses y mexicanos, desesperados sin que pudieran acceder. Era una riada inmensa de gente que iba pensando en entrar y otra riada de gente que se volvía al no conseguirlo. Corrimos a la televisión a no perdernos nada.

Los dos días anteriores sin problemas en la plaza de Colón. Nos sentamos en el suelo y ofrecimos tener las piernas tan dormidas y doloridas durante el Vía Crucis para que todo saliera bien. Conseguimos ver al Papa de cerca en dos ocasiones. Fue muy emocionante; tuvimos que correr y era impresionante ver el griterío de emoción de la gente. Nos encontramos con muchos conocidos.

A mi hija mayor la confesó el Papa. Fue una de las cuatro suertudas que lo logró. Hubo un sorteo entre los voluntarios staff y le tocó a ella. Se confesó en francés, idioma que el Papa domina junto a su lengua materna e italiano. Para ella, será el recuerdo de toda su vida, imagínate, confesarse con el sucesor de Pedro, con el Vicario de Cristo en la Tierra. Poca gente ha tenido tamaña suerte.

La confesión fue emocionante. La preparó durante los cinco días previos en donde estuvo rezando bastante, y nosotros por ella. Hicimos un ensayo de las palabras de saludo y de contrición en casa la víspera; en francés no se dice el Ave María al saludar. Optó por confesarse con estas palabras: “Jesús Tú lo sabes todo, Tú sabes que te quiero” y en la contrición: “Jesús Hijo de Dios, apiádate de mi que soy un pecador”. El Papa le habló, según nos contó, de temas generales, de ofrecer todos los actos del día, de hacer oración continua y de un consejo particular que se reserva para ella. No consiguió escuchar la penitencia por lo que tuvo que pedirle que se la repitiese (había un helicóptero muy bajo haciendo mucho ruido; se tuvo que pegar a la rejilla para entender lo que le decía). De penitencia: Una oración de alabanza a Dios. Rezó un Gloria.

La penitencia la rezó de rodillas en el suelo cerca del confesionario, rodeada de los guardias suizos, cardenales y ayudantes del Papa. Después salió a llorar por ahí sola. Se quitó de en medio de la prensa. No le dejaban hacer entrevistas. Ha cambiado mucho desde ese día. Está exultante de alegría y la comparte con todo quisqui, se ha corrido entre mucha gente la suerte que tuvo y no hacen más que llamarla y preguntarle qué le dijo y cómo fue y a nosotros también.

Las fotos de mi hija confesándose con el Papa: Antes de confesarse con los otros 3:


Maca rezando la Penitencia en la puerta de los confesionarios, rodeada de guardaespaldas suizos y cardenales:


El Papa:


No es que haya sido emocionante, para ella y para toda la familia, ha sido increíble… Le ha marcado.

22/8/11

un cuarto de hora de silencio...


PD2: Increíble el mensaje del Papa. Sencillo y aplicable a la vida ordinaria de cada uno. Sólo hay que ser fiel a la Palabra y trasmitirla al mundo entero. Yo, como sabes, en eso estoy. Más animado que nunca, con nueva vitalidad tras asistir a todo lo que he podido de la JMJ. Qué gozada, qué ambientazo, qué buena gente había por todas partes… Si es que se nota el que reza del que pasa y vive sin ideales, se nota en lo que hace después, en su comportamiento y en la forma de ver y entender la vida. Ojalá sirvan estos días de faro que iluminen a otros…

Los periodistas se sorprendían de ver la capacidad de los jóvenes de tener un largo cuarto de hora de silencio de rodillas, adorando al Santísimo el día de la Vigilia. ¡Qué no es tan raro caramba, qué ni somos unos bichos raros ni hacemos cosas extrañas! Antes ya lo habíamos hecho, y muchos solemos hacerlo a menudo. Rezar no es sólo pedir cosas o pedir por la gente de nuestro entorno. La oración vocal está muy bien, recitar todos los padrenuestros y avemarías es muy bueno; pero la oración mental de alabanza, de adoración, de bendición y de gracias, de petición también, en definitiva, hablar con Dios, es algo que los que nos acostumbramos a ello no sabemos vivir de otro modo. Le hablamos de nuestras cosas, de mi, de ti, de lo nuestro, de la familia y amigos, le damos gracias por habernos creado y por darnos todo lo que nos da, le pedimos por la gente para acercarla a Dios, le ofrecemos cosas, sufrimientos y sacrificios, alegrías y tristezas, las cosas buenas y las malas que nos pasan… E intentamos entender lo que Él nos va pidiendo día a día, lo que Él quiere de nosotros…Al menos esto es lo que yo entiendo por el hecho de ser cristiano. Si piensas que eres cristiano por el hecho de ser bueno e ir a la Santa Misa del Domingo, te falta todo esto anterior. Te falta hablar con Dios, escucharle y hacerle caso. Te pierdes lo mejor…

19/8/11

JMJ, genial


PD1: La presentación de la JMJ de ayer en Madrid genial. Ambientazo total. Agotamiento supino pero merece la pena. Hoy iremos a saludarle al pasar cuando vaya a El Escorial. Después a ver los pasos de Semana Santa. Mañana iremos a verle confesar; luego a Cuatro Vientos con esterilla incluida. Lo mejor, lo que me dice a mi. No pienses que cuando habla se lo cuenta a otros, nos lo dice a cada uno en persona. Yo trataré de ponerlo en práctica y no dejaré que sus palabras se las lleve el viento...

18/8/11

gracias


PD2: Mi hija mayor (22 años) ha sido elegida como uno de los tres que se confiesan este sábado a las 9:00 con el Papa (pon la tele, es la más guapa y reza por ella para que no tenga nervios). Es la primera vez que se hace, y de millones de peregrinos y voluntarios la han elegido a ella. Esta en una nube, imagínate, confesarse con el sucesor de Pedro. Bueno te perdona Dios y usa a un cura, aunque sea el mismísimo Papa que te absuelve. Yo que me confieso todas las semanas sé lo que es recibir la gracia de la confesión, ese sentirte bien al salir, sentirte limpio y perdonado. Qué sí, que te puedes confesar de cosas graves o de menudencias. Te acaban doliendo esas cosas pequeñas como si fueran más graves, pero la delicia es la Gracia que recibes lo bien que te encuentras luego.

Una vez en Gracia tienes dentro a Dios Espíritu Santo, en tu cuerpo y alma. Recuerdas ese lío: Dio Padre, al que rezamos los padrenuestros, el que nos quiere tanto y nos creo y nos mima, Dios Hijo, que recibimos en la eucaristía y que tanto tratamos y tantas cosas le pedimos, y Dios Espíritu Santo, que tenemos dentro de nosotros, que actúa por nosotros tantas veces, aunque muchos no lo sepan, lo tenemos dentro cuando estamos en Gracia de Dios, cuando estamos confesados y perdonados.

Imagínate que te pudiera confesar un Obispo, o un Cardenal… la pera. Pues no, le confiesa el Papa, olé por ella suertuda. Lo recordará toda su vida y le concederá la confesión aún mucha más Gracia.

PD3: Madrid está a tope de gente. Nosotros tenemos en casa a 6 portuguesas, guapetonas y simpáticas (mira que yo pensaba que los portugueses no se depilaban…) Nos hemos apretado… La gente tiene muchas ganas de aprovechar este gran acontecimiento. No te voy a mandar nada más ya que me largo ahora mismo a la calle a dar vueltas y a estar en todo, como un veinteañero más (tengo 47 tacos, pero mi espíritu hoy es de 30) El vía crucis va a ser inolvidable, esta tarde la Puerta de Alcalá, el sábado dormimos con mis niñas de 5 y 7 en el suelo en una esterilla que nos hemos apañado para estar puntuales el domingo a la Misa. A mi mujer le han invitado al aeropuerto a despedirle. Muchas emociones, pero sobre todo, tener la posibilidad de oír a este viejo Papa teólogo que dice las cosas con mucha claridad y que confío infunda muchas vocaciones entre los jóvenes.

Pues eso, gracias a los voluntarios por haber hecho esto posible, gracias al Santo Padre por venir y por haber elegido Madrid. El resto del año deberemos dar muchas gracias a Dios por estos días que ahora viviremos.